Paniego y Tondeluna: innovación y audacia en La Rioja.

Hay gestos con una fuerte carga simbólica. El 9 de junio de 2011, día de La Rioja, @FrancisPaniego abrió su restaurante @Tondeluna_ en pleno centro de Logroño. Este tipo es un emprendedor de raza, un hombre que arriesga, que innova, que propone, que anticipa. Ante la crisis lo más fácil sería quedarse en casa a esperar que escampe salvo que seas de esas personas que sueñan y convierten en realidad sus sueños.

Hoy he ido a comer con mi familia a Tondeluna, he entrado en un espacio luminoso, acogedor, sugerente, rodeado de madera viva. Me ha servido el pan artesano, sonriéndome, una mujer con síndrome de Down; Francis ha sacado un bote de pinturas, y mi crio, como otros en la sala, ha comenzado a pintar. La carta, poesía y desparpajo, sobre una tabla de madera, madera de chopo, madera de Garnica: precios asequibles, tapas jugosas, alternativas apetecibles, guiño a los celiacos.

A mi izquierda un bosque laminado de hayas, “verde que te quiero verde” y a mi derecha una cocina transparente, limpia, multirracial, una gran ventana a los productos más exquisitos. Francis dirigiendo la orquesta. Al fondo una huerta con hierbabuena y pimientos rojos y detrás de mí, gente feliz.

Entre pan de cristal, calamares con mahonesa de setas, cocochas de merluza y trozos de secreto ibérico pensaba que La Rioja más audaz estaba presente en cada uno de los detalles, en cada gesto, en cada propuesta. Este hombre de ojos vivarachos, de sonrisa fácil, de gran curiosidad por todo lo que pasa merece tener éxito. La tradición da paso a la innovación proponiendo algo diferente, un gastrobar que ennoblece esta tierra.Calidad.

Hay espacios, lugares, propuestas, personas, comidas, que más que llenar, encienden, estimulan, te hacen sonreir, te llevan a sitios que no habías imaginado. Si no tienes la mente y el corazón demasiado cristalizado ni fosilizado disfrutarás de esta propuesta noble, sensata, vital, sostenible.

Atrévete, es una delicia comer en el Tondeluna.